Si has llegado a este post, está claro que quieres aprender a limpiar tu cachimba y los accesorios para fumar con total seguridad de tu shisha, de la manera más higiénica posible.
Además, conseguiremos evitar posibles corrosiones por la cal, y las típicas manchas que se suelen quedar impregnadas en la base de cristal.
Queremos regalarte este tutorial, con el objetivo de ayudarte a mantener limpia tu cachimba. Y para ello, debes saber que existe un sinfín de productos de limpieza para shishas, con los que podrás mantenerla en perfecto estado por mucho tiempo, siempre en base a nuestra experiencia.
Cuando tenemos nuestra cachimba en perfectas condiciones de limpieza, disfrutamos mucho más de relajantes sesiones con nuestros amigos, ya que no sólo tendrá mejor presencia, sino que evitaremos mal sabor, y aromas que puedan resultar desagradables.
Cómo limpiar a fondo mi cachimba y quitar el mal olor
La idea de este post es que tú mismo/a seas capaz de limpiar la cachimba a fondo, revisar todas las juntas de silicona, desmontarla completamente, y realizar un mantenimiento integral de todas las piezas y conexiones de tu cachimba, aunque lleves poco tiempo fumando con tu shisha.
Si, en tu caso, cuentas con una cachimba que huele mal, el cristal está opaco por culpa de la suciedad, y no sabes qué producto utilizar para su limpieza, estás en el sitio adecuado. Conocerás los productos que utilizaremos para su limpieza, así como una serie de consejos y métodos básicos con los que podrás mantener tu cachimba como el primer día que la compraste.
Lo que queremos conseguir es que, cuando termines de leer este tutorial, seas capaz de realizar por ti mismo/a el mantenimiento óptimo a tu kit de cachimba, y que evites los problemas de corrosión, roscas pasadas… y todos los inconvenientes que solemos encontrarnos cuando no mantenemos nuestra shisha de una manera higiénica y desinfectada.
Paso 1: Retirar la manguera del adaptador
El primer paso será retirar la manguera de la cachimba. La manguera, o tubo a través del cual fumamos, está conectada a la pipa de agua, pero no de forma permanente. Gira suavemente la manguera de lado a lado para soltarla del adaptador, y luego tira de ella para que las piezas se separen completamente entre sí.
Si la manguera parece dura y no sale fácilmente, continúa girándola hasta que se retire, pero ten cuidado de no aplicar demasiada fuerza para no romper piezas o roscas.

Paso 2: Soplamos la manguera fuertemente desde la boquilla
Después de retirar la manguera, y separarla del cuerpo de la shisha, soplamos a través de la boquilla, para expulsar el humo residual que pueda quedarse en el interior después de cada sesión de cachimba. Esto deberíamos hacerlo cada vez que terminemos de fumar, para evitar que la acumulación de humo en su interior produzca un mal olor que quedará impregnado poco a poco en la manguera.

Paso 3: Utilizar agua para limpiar la manguera
Llega la hora de acudir a un grifo o lavabo. Cogeremos un extremo de la manguera (el de la boquilla, por ejemplo) y el otro extremo lo colocaremos de forma que hagamos un circuito en el que el agua pueda correr a través de la manguera, mediante el efecto de la gravedad.
Si la manguera es no lavable, haremos este procedimiento cada 10 o 15 sesiones de cachimbas, y tendremos que secar muy el interior con un secador, para que no se apulgare.
En cambio, si la manguera de nuestra cachimba es lavable, no tendremos problema en que se moje. En este caso, aconsejamos limpiar la manguera cada una o dos sesiones, y así evitar que los sabores comiencen a quedar impregnados en su interior.

Bajo ningún concepto utilizaremos jabón, ni ningún tipo de producto de limpieza de los que solemos utilizar en el hogar. La manguera es la parte de la cachimba más importante, ya que, a través de ella, inspiramos el humo de la shisha.
Aconsejamos, por tanto, limpiar después de cada uso, y sobre todo utilizar mangueras lavables con materiales como silicona o PVC, ya que su higiene y mantenimiento es mucho mayor.
Para este proceso, os recomendamos utilizar productos de limpieza especiales para cachimbas, que no contienen sustancias tóxicas y favorecen la eliminación del mal olor de la misma. Utilizando unas pulverizaciones en el interior de la manguera, y dejando reposar de 2 a 5 minutos, eliminaremos completamente el mal olor y sabor de la manguera. Eso sí, es importante que, después de utilizar el producto, enjuaguéis muy bien la manguera con agua tibia, para eliminar el producto al 100%.
Paso 4: Escurrimos la manguera y la secamos por dentro
Después de lavar la manguera con agua tibia, o con el producto de limpieza que hayamos utilizado, procederemos a enjuagar con agua su parte interior, para finalmente secarla. Podemos doblarla y dejarla escurriendo en un lugar en el que haya algo de corriente de aire, o utilizar un secador o compresor de aire, e introducirlo en el interior de la manguera y secarla de manualmente.

Debemos de asegurarnos que el interior de la manguera queda completamente seca, sobre todo si no es lavable. Así, evitaremos que el interior pueda llegar a producir restos, o lo que solemos llamar, «mijitas» de óxido, que después inhalaremos a la hora de aspirar. Por ello, lo ideal es una manguera para cachimbas lavable completamente, fabricada en silicona o PVC, que simplemente debemos dejar escurrir, y ya está.
Si quieres un accesorio que te ayude a secar el interior de tus mangueras, puedes utilizar un Smoking Pump, que es un compresor de aire con un pequeño motor que, además te servirá para acelerar el encendido de los carbones para tu cachimba, más fácilmente. Puedes hacerte con uno de ellos, por sólo 19’99 €, pulsando en el siguiente botón.
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Paso 5: Limpiar todas las piezas de la cachimba, una a una
Llega el momento de uno de los pasos más «trabajosos» y entretenidos. Tendremos que desmontar la pipa de agua completamente: juntas tóricas, roscas, conectores… para facilitar la limpieza por separado de cada una de sus piezas.
Para este paso, como hemos comentado anteriormente, aconsejamos utilizar un líquido de limpieza especial para shishas, asi como un cepillo para la base, y otro para el cuerpo de nuestra cachimba.

A continuación, introduciremos el producto de limpieza para cachimbas en cada una de las piezas. Impregnaremos el mástil o cuerpo de la shisha con el líquido, y lo dejaremos reposando con la base para que el producto actúe durante unos minutos. Así, conseguiremos una mayor eficacia.
Mientras tanto, utilizaremos el cepillo de limpieza de cuerpo, que habitualmente es largo y delgado, para frotar su interior. Habitualmente, está fabricado en acero inoxidable, cobre o aluminio.

Acto seguido, lo enjuagaremos con agua tibia, haciendo el mismo procedimiento que hemos comentado anteriormente para lavar la manguera. En el fregadero de casa, por ejemplo, dejaremos correr el agua por el interior del cuerpo. Aconsejamos utilizar agua caliente para una limpieza óptima.
Bajo ningún concepto utilizaremos jabones, desengrasantes o cualquier tipo de sustancia tóxica. Piensa que, después de esta limpieza, volveremos a fumar de nuestra shisha, y lo último que deseamos es intoxicarnos por no haber utilizado los productos adecuados.

Repetiremos el mismo procedimiento en juntas tóricas, conectores, bola de purga, adaptadores, cazoleta… Con la base de cristal, usaremos el mismo método. Añadiremos, por ejemplo, el producto de limpieza Hookah Clean, lo dejaremos reposar, utilizaremos cepillo de limpieza y enjuagaremos con agua tibia.

Algo que puede ocurrirnos, es que el cristal se dañe debido a los cambios bruscos de temperatura. Incluso, nuestra base puede llegar a estallar y quebrarse totalmente.
Para evitarlo, os recomendamos que pongáis la base de cristal debajo del grifo, y que utilicéis agua a temperatura ambiente. Poco a poco iremos aumentando su temperatura. Pero debe ser algo progresivo. Os garantizamos que, de esta manera, eviataréis las tan temidas «fracturas» de nuestras bases de cachimbas.
Resumen y conclusión
Hemos querido mostraros, con este tutorial, algunos consejos y prácticas que, como especialistas en el sector de la shisha, consideramos que debéis conocer a la hora de limpiar vuestra hookah.
Si seguís esta guía, os garantizamos que mantendréis vuestra cachimba en unas condiciones óptimas e higiénicas. Y el resultado de todo esto será que, prolongaréis su vida por mucho más tiempo, además de disfrutar de unas sesiones y fumadas muchísimo más placenteras.
Desde Zulo Shishas, os aconsejamos que echéis un vistazo a nuestra gama de productos de limpieza y mantenimiento de cachimbas. Seguro que hay accesorios que deberiais tener un vuestro maletín.
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Y sobre todas las cosas… ¡Disfrutad de vuestros amigos/as durante vuestras sesiones de shisha! Eso es lo principal.
Jesús Díaz
CEO de Zulo Shishas
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